EL ALZHEIMER
El pasado 21 de septiembre se celebró el Día Mundial de la enfermedad de Alzheimer. Por ello quiero referirme a esta demencia que resulta más frecuente de lo esperado y que muchos desconocemos o tenemos una idea vaga de la misma.
Se estima que en todo el mundo hay más de 55 millones de personas que viven con la enfermedad de Alzheimer u otras demencias.
Una Demencia para respetar:
Cuando hablamos de Demencia, algunas personas piensan de inmediato en algún desorden Psiquiátrico de importancia y consideran que la persona padece de “locura”. Sin embargo, cuando se habla de Demencia nos referimos fundamentalmente a un grupo de síntomas entre los cuales podemos mencionar como importantes: la pérdida de memoria; problemas en el pensamiento y cambios de conducta relativamente graves, provocados por dificultades cerebrales. El tipo más común de Demencia es la enfermedad de Alzheimer.
¿Cuáles son sus principales síntomas?
Pérdida lenta de memoria que va afectando a la persona en su vida cotidiana.
Dificultades para realizar actividades simples de la vida diaria, como vestirse o cocinar.
Problemas para nombrar objetos comunes.
Pérdidas frecuentes, incluso en lugares conocidos.
Dificultades en el pensamiento (se ve afectada principalmente la habilidad de tomar decisiones).
Problemas para hablar y expresarse con claridad
Cambios en el estado de ánimo, conducta, sentimientos, etc.
Pérdida de interés en diferentes actividades habituales, pasatiempos o actividades recreativas.
En ocasiones pueden presentar síntomas similares a la depresión (como tristeza o problemas de adaptación) o a la ansiedad.
Se describe la enfermedad de Alzheimer como una demencia degenerativa, irreversible y progresiva, lo que quiere decir que las células cerebrales mueren o se degeneran, que no tiene cura, pues los daños causados no se recuperan y van en aumento, es decir, progresan.
Aún se desconoce las causas de esta enfermedad, y tampoco se sabe cómo poder detenerla, sin embargo, se estima que no forma parte del envejecimiento normal; afecta por igual a ambos sexos y es más frecuente en personas mayores de 65 años.
A pesar de todo lo anteriormente referido, podemos ayudar a las personas que presentan el Síndrome de Alzheimer
Usted puede:
Estimular a la persona con Alzheimer a comunicarse con las personas que le rodean, para ello es necesario valerse de diferentes formas para que le lleguen los mensajes y pueda a su vez, a través de cualquier vía comunicar lo que quiere, siente, etc. Trate de llamar su atención; hacer contacto cara a cara; hable despacio y claro; utilice un lenguaje simple, sencillo; repita lo más importante; esté atento a las reacciones de la persona. Todo esto puede ayudar en mejorar la comunicación y brindarle mayor calidad de vida.
Dejar que realice las actividades que aún puede llevar a cabo.
Mantenga en el hogar fuera del alcance de la persona sustancias, objetos, y otros que puedan resultar dañinos para ellas.
Simplifique las tareas que deba hacer esa persona, pero bríndele la posibilidad de tomar decisiones, si están a su alcance.
Establezca rutinas en su vida diaria, eso le permite conocer que va a ocurrir, y se sentirá más segura. De la misma forma podemos recordarle realizar diferentes actividades simples, como ir al servicio sanitario, bañarse, etc.
Mantener, en lo posible, a la persona con Alzheimer activa en el día a día.
Sabemos que no es fácil, pero si posible, ¿no lo cree usted?
¡Nos vemos en la próxima!